Abengoa, desde su posición de empresa internacional, aboga por un crecimiento sostenible basado en el respeto a los derechos humanos dentro de la organización, en su cadena de valor y en su área de influencia. En esta línea, la compañía rechaza de forma tajante el trabajo forzado y la explotación infantil y apoya toda iniciativa dirigida a erradicarlos.
Consciente de la responsabilidad de hacer respetar los derechos humanos, Abengoa somete a evaluación y revisión todas sus operaciones, midiendo su impacto en materia de derechos humanos, y lo hace en las más de 600 sociedades que forman la compañía y en los cinco continentes donde despliega sus operaciones. Durante 2011 no se han producido quejas relacionadas con los derechos humanos que se han presentado mediante mecanismos formales de reclamación. Tampoco se han detectado actividades o incidentes que impliquen riesgos en materia de discriminación, libertad de asociación, explotación infantil o trabajo forzado.
Para garantizar la protección de los derechos de sus empleados, todas las personas que forman parte de la compañía están bajo el ámbito de aplicación de regulaciones laborales supraempresariales independientemente de la naturaleza de sus actividades o de los países en los que se realizan. Además del amparo legal de cada país, la cobertura normativa cobra una importancia especial gracias a los convenios colectivos del sector, los territoriales o los pactos propios de empresa, firmados con los trabajadores, representantes unitarios o los sindicatos, según el caso.
Abengoa respeta y apoya la libre asociación de sus trabajadores, que considera un derecho inalienable. Mediante el diálogo permanente con sus representantes los mantiene informados de todas las áreas de su interés.
Asimismo, la compañía garantiza a los empleados, como un derecho laboral básico, que serán informados previamente de cualquier cambio estructural u organizativo que se produzca en la compañía, ya sea a título individual o a través de sus representantes, según los plazos de preaviso establecidos en la legislación y los convenios colectivos, como un derecho laboral básico.
Abengoa asume estos principios en sus prácticas laborales y acomoda la actuación profesional de sus empleados a la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, y a sus protocolos.
En este sentido, la formación es una de las herramientas más potentes de las que dispone Abengoa para evitar que se produzcan incidentes relacionados con la vulneración de los derechos humanos, ya que invierte en ella para que los empleados conozcan la cultura corporativa así como los valores de la organización, recogidos en su Código de Conducta.
Esta protección de los derechos fundamentales se hace extensiva a la cadena de suministros, por eso, los proveedores y subcontratistas de la compañía están obligados a firmar el Código de Responsabilidad Social (CRS)2, que especifica la política de la compañía en torno a la protección de los mismos, antes de realizar cualquier actividad con la organización.
Debido a estas medidas preventivas, no se tienen indicios de incidentes relativos a ninguna de las situaciones antes citadas ni se han producido incumplimientos de los derechos humanos; ni por parte de los profesionales de Abengoa ni por la de los proveedores y subcontratistas.
Conforme a los compromisos de responsabilidad social adquiridos en virtud de la adhesión al Pacto Mundial de las Naciones Unidas en 2002, y a los derivados del propio Código de Conducta de la organización, Abengoa desarrolla una política de responsabilidad social laboral que integra un sistema de gestión inspirado en la norma internacional SA8000, que garantiza una mejora continua en el desempeño social de la compañía, que cumple con los siguientes compromisos:
El sistema de remuneración de la compañía respeta la normativa legal, además de los compromisos y principios que ilustran las políticas de Abengoa. Este sistema tiene en cuenta la capacidad, el desempeño y la calidad en el trabajo, lo que garantiza la igualdad de trato y de oportunidades. El esquema retributivo de Abengoa no establece diferencias relativas al género, en ninguna de las categorías profesionales o zonas geográficas en las que se encuentra.
Comparativa del salario bruto medio de mujeres y hombres para una misma categoría profesional en distintas zonas geográficas.
Diferencia porcentual entre el salario medio inicial en Abengoa, y el salario mínimo interprofesional (SMI) local, teniendo en cuenta diversas categorías profesionales
Abengoa dispone de un programa de desarrollo directivo y de un sistema específico para la evaluación de su desempeño basado en la metodología 360, que evalúa un total de 5 competencias a través de 25 preguntas: liderazgo, compromiso, toma de decisiones, visión estratégica y orientación a resultados. Durante 2011 han participado 628 empleados en dicho programa.
Este es un proceso de mejora continua, que permite a Abengoa y a sus empleados observar su evolución y adaptar el sistema a las nuevas orientaciones estratégicas.